El expresidente de Estados Unidos, Donald J. Trump está haciendo campaña para la reelección este otoño y atacando a la industria de los autos eléctricos. Trump ha pedido donaciones a los ejecutivos de la industria del petróleo y gas a cambio de revertir las políticas climáticas de la administración Biden. Si es elegido, planea reducir los objetivos de emisiones y eliminar los créditos fiscales para vehículos eléctricos (EV).
A pesar de sus esfuerzos, el mercado de EV ha crecido significativamente desde su presidencia en 2016, cuando se vendieron 159,139 EV en Estados Unidos, y se espera que en 2024 se vendan más de 1.5 millones. Incluso si Trump frena los créditos fiscales, el mercado podría estar en un punto de crecimiento irreversible.
William Clay Ford Jr., presidente ejecutivo de Ford Motor, comentó que los ciclos políticos complican la planificación a largo plazo de la empresa.
La Ley de Reducción de la Inflación del presidente Joe Biden ha impulsado la inversión en la manufactura de Estados Unidos como la inversión de $13 mil millones de Hyundai en Georgia. Amenazando los empleos de los trabajadores, Trump podría perjudicar su campaña en estados dependientes de la manufactura.