Un nuevo estudio de Microsoft y Carnegie Mellon University encontró que el uso frecuente de AI generativa en el trabajo puede reducir el pensamiento crítico de los empleados. La investigación, basada en encuestas a 319 trabajadores, reveló que cuanto más confiaban en el AI para realizar tareas, menos esfuerzo ponían en evaluar sus respuestas.
Según los investigadores, esta falta de análisis puede llevar a una dependencia excesiva de la IA, reduciendo la diversidad de pensamiento y la capacidad de resolver problemas de forma independiente. “La IA puede mejorar la eficiencia, pero también reducir el compromiso crítico, especialmente en tareas rutinarias”, advierten.
Sin embargo, los expertos no proponen eliminar el AI, sino diseñar herramientas que motiven a los usuarios a reflexionar, analizar argumentos y verificar información en lugar de simplemente aceptar respuestas generadas.