La disputa legal entre Elon Musk y OpenAI sigue intensificándose, con nuevas revelaciones que destacan tensiones internas y desacuerdos en la dirección de la compañía. En un blog reciente, OpenAI compartió mensajes entre Musk y los cofundadores Ilya Sutskever, Greg Brockman y Sam Altman, que muestran cómo Musk intentó asumir el control como CEO y convertir a OpenAI en una subsidiaria de Tesla. Estos intentos llevaron a su renuncia en 2018, después de que sus propuestas fueran rechazadas por temor a luchas de poder internas. Musk, quien más tarde fundó su competidor xAI, acusó a OpenAI de desviarse de su misión original como organización sin fines de lucro.
OpenAI respondió a las acusaciones de Musk defendiendo su compromiso con la inteligencia artificial para el bien público, señalando que el litigio debería ser reemplazado por competencia en el mercado. Además, destacaron que su transición a un modelo de lucro limitado fue esencial para obtener los fondos necesarios para continuar desarrollando tecnologías avanzadas de IA. Esta batalla expone no solo los desacuerdos estratégicos, sino también las ambiciones de Musk en el desarrollo de IA y su visión a largo plazo para financiar proyectos como una ciudad en Marte.