Los principales cines de Estados Unidos y Canadá están invirtiendo en una significativa modernización de sus instalaciones, con planes de gastar $2.2 mil millones en los próximos tres años para actualizar 21,000 pantallas. Según informa Variety, estas mejoras no solo incluyen tecnología de punta en proyección y sonido, sino también la introducción de nuevas atracciones como canchas de pickleball, tirolinas y boleras. Michael O’Leary, presidente y CEO de la Asociación Nacional de Propietarios de Teatros (NATO, por sus siglas en inglés), expresó optimismo sobre el regreso del público a las salas de cine, destacando la necesidad de enriquecer la experiencia cinematográfica colectiva para competir con las plataformas de streaming.
La estrategia incluye no solo mejoras en la comodidad como asientos más confortables y mejoras en sistemas de aire acondicionado e iluminación, sino también en expandir la oferta de entretenimiento dentro de los cines. Estas inversiones buscan reinventar lo que significa ir al cine, integrando actividades que van más allá de la visualización de películas, buscando atraer a un público que ha optado por esperar a que los filmes estén disponibles en streaming. Aunque el éxito de esta renovación masiva todavía está por verse, el compromiso financiero de estos cines indica una recuperación significativa desde los peores momentos de la pandemia.