Durante la semana de su lanzamiento completo, Call of Duty: Black Ops 6 se convirtió en el juego más jugado en Estados Unidos en las consolas PlayStation 5 y Xbox Series, según datos de Circana. La popularidad del título fue especialmente notable en Xbox Series, donde el 58% de los jugadores activos estuvieron dedicados a Call of Duty, mientras que en PS5 el porcentaje alcanzó el 37%. Estos datos reflejan el éxito inmediato de la franquicia en su más reciente entrega, dominando el tiempo de juego de millones de usuarios en ambas plataformas.
El lanzamiento de Black Ops 6 reafirma el estatus de Call of Duty como uno de los títulos más esperados y jugados en consolas de nueva generación, superando a otros títulos importantes en el mercado. La preferencia por el juego en Xbox puede atribuirse a su fuerte base de usuarios en esta plataforma, aunque también mantuvo una presencia significativa en PS5. La amplia aceptación de esta entrega demuestra la fuerza de la franquicia y su capacidad para capturar la atención de la comunidad de jugadores año tras año.