El personal sindicalizado de Raven Software, el estudio detrás de Call of Duty, ha presentado una queja ante la Junta Nacional de Relaciones Laborales, acusando a Activision y Microsoft de “Negociación de mala fe”. Según el informe de GameFile, los trabajadores se sienten frustrados con la falta de avances en las negociaciones del contrato desde la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft. El presidente de la CWA, Claude Cummings Jr., ha instado a Microsoft a abordar las preocupaciones planteadas y priorizar un acuerdo justo.

Por su parte, Microsoft ha asegurado que está comprometida con las negociaciones de buena fe. Activision Blizzard reconoció oficialmente al sindicato, Game Workers Alliance, en 2022. Aunque el ex CEO Bobby Kotick prometió negociaciones de buena fe, el proceso para llegar a un contrato laboral puede tomar tiempo. Los trabajadores esperan que se cumpla con esta promesa y se establezca un acuerdo que beneficie a todos los empleados.