A pesar de que la PlayStation 5 y sus variantes han estado vendiéndose muy bien en comparación con Xbox, las nuevas tarifas impuestas por el gobierno de Estados Unidos bajo Donald Trump podrían afectar las ventas de consolas en el futuro. Sony, consciente de los posibles efectos de estas tarifas, ha anunciado nuevas estrategias para combatirlas sin que los consumidores se vean afectados por el aumento de precios.
Según el informe de resultados del tercer trimestre de FY2024, Sony espera que el impacto de las tarifas sea mínimo por ahora. La compañía está duplicando sus cadenas de suministro y almacenando inventarios en los EE.UU. para responder de manera flexible a las tarifas y sus efectos secundarios. Aunque se había especulado sobre un posible aumento de precios en la PS5 y su variante Pro tras el anuncio de las tarifas, Sony no tiene planes de elevar los costos, gracias a estas nuevas medidas.
Un estudio realizado por la Consumer Technology Association previamente sugirió que las tarifas de Trump podrían aumentar los precios de las consolas de videojuegos hasta un 40%. Esto implicaría que la PS5 Pro podría llegar a costar entre $700 y $980 si las estrategias de Sony no logran mitigar los efectos de las tarifas.