La startup china DeepSeek ha desafiado el liderazgo de las empresas estadounidenses en inteligencia artificial al presentar su modelo R1, que ofrece capacidades similares a ChatGPT pero a una fracción del costo. Mientras que compañías como Meta y OpenAI invierten miles de millones en desarrollo, DeepSeek logró este avance con solo $5.6 millones, utilizando chips menos potentes.
Este anuncio provocó un desplome en las acciones tecnológicas, con Nvidia, Meta y Alphabet liderando las pérdidas. La S&P 500 y Nasdaq también abrieron a la baja, reflejando la incertidumbre de los inversores sobre el futuro del liderazgo estadounidense en IA.
Aunque el impacto a largo plazo de DeepSeek está por verse, la industria ahora enfrenta un desafío directo que podría redefinir la competencia global en IA.