El mundo de las adaptaciones de videojuegos a la pantalla grande es una verdadera montaña rusa, donde a veces obtenemos grandes aciertos y en otras ocasiones resultados decepcionantes. Sin duda, el estreno de Sonic 3 puede considerarse un milagro navideño, ya que esta entrega consolida una trilogía bastante exitosa, complementada con una serie de televisión.

En Sonic 3, vemos al Team Sonic, compuesto por Sonic, Knuckles y Tails, nuevamente interpretados por Ben Schwartz, Colleen O’Shaughnessey e Idris Elba. El equipo es reclutado por GUN para detener a Shadow, quien, tras 50 años, logra escapar. Sin embargo, tras ser derrotados rápidamente, el trío debe unir fuerzas con una figura de su pasado para enfrentar a este misterioso personaje lleno de venganza.

Los fans de la franquicia quedarán más que satisfechos con la historia, las referencias, como la música, y los momentos épicos. Aunque considero que la película anterior es mejor como obra cinematográfica, salí del cine completamente satisfecho.

La trama es entretenida, en gran parte gracias a las actuaciones del elenco, especialmente la de Keanu Reeves, quien interpreta a Shadow. Su tono de voz encaja perfectamente con el personaje, destacándose en múltiples escenas. Además, fue emocionante ver el desarrollo de Sonic como personaje. Sin embargo, no hay duda de que Jim Carrey vuelve a robarse el show, esta vez interpretando no a uno, sino a dos personajes. Cada vez que aparece en pantalla, brilla y es imposible no reír con sus ocurrencias.

Mi única crítica es que la película no logra equilibrar el humor y los momentos serios tan bien como la anterior. Cada vez más, los personajes se están volviendo caricaturas de sí mismos, lo cual no es necesariamente malo si se mantiene un balance adecuado.

Sonic 3 no defraudará a los fans, dejándolos en un estado de euforia en múltiples momentos. Las actuaciones del elenco hacen un buen trabajo, y Keanu Reeves encaja de manera natural en su papel. Sin duda, esta entrega se lleva un “Like” bajo el sistema de Like o No Like de Yo Soy Un Gamer.